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Magíster en Trabajo Social avanza en internacionalización a nivel latinoamericano
El programa de Magíster en Trabajo Social, mención Familia y Territorio & Comunidad, que imparte la Escuela de Trabajo Social de nuestra Casa de Estudios, comenzó sus postulaciones en agosto de este año. Este postgrado inició sus actividades en el año 2009, acogiendo a profesionales interesados en una formación de segundo ciclo que amplifique horizontes analíticos de carácter reflexivo, como también metodologías de intervención en los ámbitos psicosociales, socioculturales y sociopolíticos en los cuales el oficio del Trabajador Social despliega su quehacer.
Es un programa de magíster de orientación interdisciplinaria y dirigida a Trabajadores y Trabajadoras Sociales y profesiones afines de las ciencias sociales. “En una mirada retrospectiva, el magíster ha tenido desafíos en diversos niveles, el primero y más significativo, es la convergencia de alumnos que colaboran para sostener el nivel disciplinario y profesional de la propuesta de postgrado y de lo situado que éste requiere, considerando que los y las estudiantes en el ejercicio cotidiano se ven confrontados a nuevos escenarios y dilemas que presenta el oficio”, indicó la directora del Magíster. Dra. Adela Bork Vega.
Un segundo desafío que ha enfrentado el programa es la incorporación de profesionales de otros países, específicamente de Colombia y Perú, logrando responder a los retos que comparten al pertenecer a la misma región de América Latina, existiendo variabilidades culturales que favorecen una instancia de aprendizaje sistemático, tanto para académicos (as) como para el resto de alumnos (as).
“También hemos enfrentado el desafío de integrar a profesionales de otros oficios, que perteneciendo a las ciencias sociales de forma principal, motivaron intercambios y diálogos reflexivos que pusieron en valor la definición misma del magíster, la cual siempre fue expresada para profesionales de las ciencias sociales y en claves interdisciplinarias”, complementó la Dra. Bork.
Este año, el programa ha tenido que modificar la convocatoria que siempre fue de carácter presencial a una modalidad no presencial, es decir, remota en una primera instancia. “Esto es un desafío igualmente para el claustro académico que debe modificar sus prácticas de docencia, incorporar de forma rápida el uso de plataformas que permitan continuar el programa comprometido tanto en la exhaustividad de los contenidos, como en los plazos para la formación de este postgrado”, indicó la directora.
LA IMPORTANCIA DE LAS MENCIONES
Respecto a las dos menciones que ofrece el programa en Comunidad & Territorio y la mención Familia, son ámbitos de trabajo en que el Trabajo Social -como los otros oficios de los participantes del Magíster-, han tenido una injerencia significativa a través del tiempo, ya que son expresiones de las realidades sociales en los que la condición humana sin diferencias participa y se inscribe de forma radical.
“La existencia humana circula y transita para acoger y ser acogido, precisa de espacios para que esto sea posible y, en su máxima crea comunidades que siendo a pequeña escala, luego se transforman en las comunidades políticas que posibilita la vida en común. Los cambios y transformaciones que ha tenido la sociedad chilena tanto a nivel cotidiano, como en lo referido a las estructuras e instituciones, no ha quitado la preeminencia de estos ámbitos y campos del quehacer profesional, los cuales evidencian una sociedad demandante, deliberativa, conocedora de derechos y responsabilidades”, propone la Dra. Bork.
Las políticas públicas y programas sociales, son instrumentos públicos que pueden apoyar y/o inhibir el despliegue de los individuos, familias, grupos y comunidades, lo cual genera desafíos al Trabajo Social, para lograr incorporar otras formas de intervención, nuevos modos de lectura, como también una re-significación de lo público, como lugar en el cual se gestan nuevos modos de convivencia y gestación del vínculo social.
“Familia y Comunidad & Territorio, son formas sociales en las cuales la condición humana expresa su vitalidad individual y colectiva, posibilitando el sentido de ratificación y pertenencia”, propone la académica.
Los egresados del programa se sitúan en diversos campos profesionales. Algunos se desempeñan como profesores de Trabajo Social cursando estudios doctorales. Otros han enfrentado nuevas responsabilidades a nivel laboral; además de integrarse a equipos de investigación interdisciplinaria; elaborando políticas y programas sociales a nivel ministerial; trabajando en ONGs o prosiguiendo estudios de doctorado en el extranjero.
El claustro académico, es integrado por expertos (as) con una dilatada trayectoria universitaria en claves amplias y específicas a la vez. El equipo lo conforman, trabajadores sociales, filósofo, economistas, historiador, psicólogos, sociólogo y geógrafos. Los académicos tienen grados de doctor y magíster, trabajo de investigación en equipos nacionales e internacionales, estadías y clases en universidades extranjeras, publicaciones y ejercicio profesional situado, lo que implica que la reflexión y la acción profesional se encuentran aseguradas para ser compartidas en la docencia de postgrado.
“Todo estos atributos académicos, se completan con el compromiso que sostienen hacia nuestro programa, lo que asegura una forma de docencia que pone en valor la experiencia profesional de los y las estudiantes, haciendo plausible espacios de diálogo e intercambios, cuestión necesaria en la formación de un magíster que se inscribe en el ámbito de las ciencias sociales en general y del Trabajo Social de forma particular”, concluye la Dra. Adela Bork.
Entre los temas que han investigado los exalumnos de este postgrado se incluyen: el enfoque de derechos en programas de prevención focalizada; la cultura comunitaria de las organizaciones sociales de mujeres en Punta Arenas; y el desplazamiento cotidiano y la vulnerabilidad escolar.
